https://doi.org/10.37527/2021.71.S1
1Universidad Autónoma de Baja California, Mexiclai, México.
Antecedentes y objetivo. La malnutrición está caracterizada por padecer desnutrición, desequilibrio de nutrientes por exceso o deficiencia y la presencia de sobrepeso y obesidad. Estos últimos, cada vez en aumento, situación que se puede contrarrestar mediante la promoción de estilos de vida saludable, especialmente en la etapa de transición a la adultez con el fin de disminuir el riesgo de enfermedades crónicas no transmisibles asociadas a la nutrición. Objetivo. Realizar la valoración nutricional en población atendida en el Centro de Promoción de la Salud Nutricional (CEPSAN) de la Universidad Autónoma de Baja California, con el fin de identificar factores presentes de malnutrición.
Métodos. A los usuarios de CEPSAN, se les aplicó un cuestionario de historia clínica y un cuestionario de frecuencia de consumo de alimentos para evaluar la dieta. La valoración antropométrica incluyó la medición del peso y talla para determinar el índice de masa corporal (IMC) y la medición de la circunferencia de cintura y cadera para determinar el índice cintura/cadera (ICC). El porcentaje de masa grasa y masa muscular se determinó por bioimpedancia eléctrica.
Resultados. Se evaluaron a 79 adultos con edad promedio de 22 años, 78% fueron mujeres y 22% hombres. El 59% hombres y 29% mujeres presentaron sobrepeso y 18 % y 32% obesidad, respectivamente. Los valores de grasa corporal (GC) estuvieron dentro del rango aceptable alto (%GC hombres = 25.65 vs %GC mujeres= 28.9). El riesgo de enfermedad cardiovascular determinado por el índice de cintura/cadera en ambos sexos fue bajo (< 85 para mujer y <1 para hombres). El consumo energético en mujeres fue de 2882 kcal/d y de 3238 kcal/d para hombres; la distribución energética fue 33% de grasa para ambos sexos, de carbohidratos 47% para hombres y 53% mujeres, y proteína fue de 20% para hombres y 16% mujeres; el consumo de micronutrientes fue adecuado.
Conclusiones. La creación de CEPSAN contribuye al diagnóstico oportuno del estado nutricional y fomenta la adopción de hábitos saludables, mediante la atención nutricional a la comunidad universitaria y población en general, con el fin de disminuir el riesgo de enfermedades crónicas en un futuro en adultos jóvenes.