1 Universidad de Antioquia, Medellín, Colombia.
La transición nutricional y epidemiológica ocurrida a nivel mundial en los últimos años ha evidenciado el incremento de enfermedades crónicas no transmisibles en todas las edades, mediadas por el incremento en el consumo de alimentos procesados, altos en calorías, grasas, azúcares y sodio, favorecidos por la creciente tendencia de consumo de alimentos fuera de casa que han desplazado las preparaciones tradicionales, así como la educación tradicional para elaboración de alimentos a inclusión de ingredientes frescos en la mesa. Adicionalmente el mercado cada vez más globalizado genera comensales más exigentes que además de la preparación quiere tener en su mesa un plato especial y variado, aunque no siempre nutritivo. Este círculo vicioso crea ambientes y hábitos obesogénicos que afectan la salud del consumidor y de su entorno familiar, proponiendo un gran reto para su intervención que transciende el modelo biomédico actual de atención en salud y nutrición, y que orienta hoy día a generar estrategias de asesoramiento nutricional y alimentario integral que cobije toda la cadena alimentaria, desde el cultivo de alimentos hasta su servida en el plato del consumidor. Sin embargo es para el profesional de Nutrición y Dietética un reto la formulación de estrategias innovadoras para fomentar una “alimentación saludable” en una sociedad sin tiempo. Allí es importante analizar la influencia del sector de la restauración en la alimentación de colectividades y hacer uso de la gastronomía como herramienta para lograr impactos en la nutrición de los seres humanos. En la alimentación convergen ambas disciplinas y llama la atención que sean los gastrónomos quienes hoy lideren el tema de llevar la nutrición a sus cocinas, cuando deberíamos trabajar de manera articulada. La invitación entonces es a fusionar nuestros saberes desde la formación profesional cultivando el “placer de comer saludable” en pro de la salud y nutrición humana.