Comunicaciones Orales

CO146. GASTO Y CONSUMO DE LÁCTEOS, BEBIDAS Y JUGO AZUCARADOS EN LOS HOGARES DEL GRAN SANTIAGO ENTRE 1987 Y 2007, CHILE

María Mirta Crovetto Mattassi1, Ricardo Uauy2

1 Facultad de Ciencias de La Salud, Centro de Estudios Avanzados, Universidad de Playa Ancha, Valparaíso, Chile; 2 Instituto de Nutrición y Tecnología de los Alimentos, Universidad de Chile, Santiago, Chile.

Chile ha tenido grandes cambios en la alimentación en los últimos 20 años, sustituyendo alimentos protectores por otros de riesgo para la salud. Objetivo: Describir y comparar el gasto y consumo de lácteos, bebidas y jugos azucarados procesados, respecto a las Guías alimentarias de Chile y las recomendaciones de calcio y azúcares del Instituto de Medicina de Estados Unidos y de la Asociación Americana del Corazón. Metodología: Análisis del gasto en alimentos al interior de los hogares en base a las encuestas de Presupuestos y Gastos Familiares del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) en muestras representativas de hogares entre 1987 y 2007 para obtener disponibilidad de lácteos, bebidas, jugos para el total de hogares (TH)y quintiles de menor y mayor ingreso (II y V). Resultados: Todos los hogares aumentan el gasto en lácteos, bebidas y jugos. El consumo aparente de lácteos (2007) es de 280 ccper capita/d en el TH; de 207 cc per cápita/d en el QII y de 387 cc per cápita/d en el QV, representando una disponibilidad de calcio de esta fuente de 297 mg; 232 mg y 378 mg per cápita/d, respectivamente, lejos de los tres lácteos diarios de las Guías Alimentarias. El consumo aparente de bebidas y jugos azucarados (2007) es de 289 cc per cápita/d en el TH;de 530 cc en el QII y de 505 cc en el QV, con un aporte de 100 kcal; 188kcal y 176 kcal/per cápita/día, provenientes de azúcares agregados sobrepasando las Recomendaciones de la Asociación Americana del Corazón que indica que el consumo de azúcar diario, no exceda las 100 kcal/d en las mujeres y 150 kcal/ en los hombres. Conclusiones: El bajo consumo de calcio y el alto consumo de azúcares agregados pueden afectar la salud ósea y contribuir al sobrepeso y obesidad de la población.