Conferencias

Nutrición materna y salud infantil

Reynaldo Martorell

Emory University, Atlanta, Estados Unidos

Introducción y objetivos: Se revisa la literatura reciente sobre la importancia de la nutrición materna para la salud infantil. Algo novedoso es que se considera no solo la nutrición de la madre durante el embarazo si no también durante el preembarazo, la adolescencia, la niñez e incluso el periodo fetal de la futura madre. Las variables de desenlace incluyen complicaciones durante el parto, mortalidad materna y fetal, crecimiento fetal, tamaño al nacer y pre-termino, entre otras. Desarrollo El retardo en crecimiento lineal ocurre comúnmente durante los primeros 1000 días, o sea durante la gestación y los primeros dos años de vida. Datos de un estudio de mediciones de ultrasonido en Vietnam muestran que el retardo en crecimiento empieza muy temprano en el embarazo; datos de muchos países muestran que este retardo se prolonga hasta los dos años y que lo perdido no se recupera. Aun en países pobres como la India, los niños mayores de dos años conservan el enanismo nutricional pero a la vez alcanzan una velocidad de crecimiento en talla igual que la de niños de los estándares de la OMS. Es por eso que la baja estatura que caracteriza a los adultos de países pobres es un resultado de este retardo en la vida temprana. La baja estatura en mujeres se asocia con complicaciones durante el embarazo y mortalidad materna y fetal. Un estudio en Guatemala encontró que la combinación más peligrosa es baja estura en la madre (cuartil superior de la distribución) y mayor circunferencia cefálica en el niño (cuartil superior). Usando datos de estudios de cohortes de nacimiento de Brasil, Guatemala, India y las Filipinas, se pudo relacionar el peso al nacer y el crecimiento lineal durante diferentes etapas de la niñez en futuros padres y madres con el peso al nacer de sus hijos. Se encontró que un mejor crecimiento lineal durante los primeros 1000 días, pero no después, se asoció con un mejor peso al nacer en la siguiente generación. El tener baja talla a los dos años de vida se asoció con una pérdida de 108 g de peso al nacer en el caso de futuras madres y 29 g en futuros padres. La baja talla a los dos años de edad en niñas guatemaltecas se asoció con una menor edad al casarse y más embarazos e hijos. La influencia de la ganancia de peso durante el embarazo sobre la salud infantil es muy conocida. Un estudio en Vietnam, donde 30% de las mujeres tiene un índice de masa corporal (IMC) menor del 18.5, el peso antes de la concepción tuvo un efecto similar pero independiente del de la ganancia de peso al nacer. La serie de Lancet ( 2013) sobre nutrición materno-infantil destaca la tendencia en el IMC en las últimas décadas. Se observa una disminución en la prevalencia de bajo peso (IMC < 18.5) en todas las regiones y países del mundo y a la vez un aumento marcado en la prevalencia de sobrepeso y obesidad ( IMC> 25.0) en mujeres de edad fértil. Hoy día, hay más sobrepeso y obesidad en el mundo que bajo peso. Según la serie, la obesidad materna aumenta el riego de diabetes gestacional, preeclampsia, hemorragia y mortalidad neonatal e infantil. Las deficiencias en icronutrientes en la madre repercuten también en la salud infantil. La suplementación peri-concepcional con ácido fólico previene los defectos del tubo neural e intervenciones para solventar las deficiencias en hierro y calcio se estima podrían reducir una proporción importante de la mortalidad materna. Los estudios experimentales de eficacia muestran que la suplementación con varios micronutrientes tiene un efecto positivo e importante en el peso al nacer, entre ellos el calcio, la suplementación proteicocalórica, la suplementación con hierro y ácido fólico, y la suplementación con múltiples micronutrientes. El embarazo en adolescentes tiene consecuencias sociales y biológicas de gran importancia. La edad al primer embarazo se asocia con muchos efectos adversos en los niños: bajo peso al nacer, prematurez , anemia y mortalidad infantil entre otros. El intervalo corto entre embarazos tiene repercusiones similares. Conclusiones La prevención del retardo en el crecimiento durante los primeros 1000 días es una estrategia para mejorar la salud y sobrevivencia de la futura generación. La prevención del embarazo en adolescentes es prioritaria debido a sus efectos sociales y biológicos. Necesitamos mejores estrategias y programas para mejorar el estado nutricional de mujeres antes y después de la concepción, con particular atención al IMC saludable, la suplementación oportuna con ácido fólico y al combate de las deficiencias en hierro y calcio.