Universidad Nacional de Córdoba, Córdoba, Argentina
Introducción/Objetivos: En Argentina el documento sobre Buenas Prácticas en Información, Comunicación y Educación en Alimentación y Nutrición de FAO revela falencias y contradicciones en la formación y prácticas educativas de los nutricionistas. Hallazgos que debieran problematizarse a la luz de las percepciones, experiencias, trayectorias institucionales y contextos de quienes ejercen la docencia cotidianamente. Desde 1986, el curriculum de la Licenciatura en Nutrición de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) tiene un importante peso en la formación pedagógico-didáctica que impacta en la identidad de quienes allí se forman. Así, las concepciones y valoraciones de los profesores acerca de la función educativa del nutricionista se expresan en la práctica del currículo y deben ser consideradas para proponer prácticas educativas superadoras. Objetivo: analizar las concepciones acerca del nutricionista educador (NE) que tienen los docentes de la Escuela de Nutrición de la UNC. Desarrollo :Se utilizó metodología cualitativa con entrevistas semiestructuradas realizadas a diecinueve docentes mujeres (Profesoras Titulares, Adjuntas, Asistentes y Profesionales Adscriptas) que se desempeñan en el área educativa, quienes comparten un espacio social común con características y trayectorias que hacen a su singularidad. Se privilegió la comprensión de sus visiones sobre la intención de generalizar las conclusiones de este trabajo. Los aspectos indagados fueron: Los fundamentos por los que considera que el Licenciado en Nutrición es un educador, sus fortalezas y debilidades, y las dificultades y falencias experimentadas en la práctica educativa cotidiana. Se analizaron y contrastaron las respuestas, al interior y entre sí. A partir de los fragmentos de entrevistas más representativos se conformaron mediante cuadros categorías empíricas, descriptivas y analíticas, se analizaron sus relaciones internas y con los fundamentos teóricos a fin de comprender el significado de sus concepciones. Resultados: todas las docentes reconocen al nutricionista como educador. De sus argumentos emergen significados comunes al grupo, así como otros en oposición y tensión vinculados a las propias experiencias. La concepción del NE aparece relacionada con dos categorías analíticas: facilitador y trasmisor. La primera vinculada teóricamente con la pedagogía constructivista, donde quien aprende construye su propio conocimiento. Este proceso implica sucesivas resignificaciones de saberes previos y el educador opera como mediador entre dos tramas de conocimiento diferentes: los preconceptos, normas, valores y experiencias del estudiante y el conocimiento organizado, científicamente fundado que se pretende enseñar (2, 3). Este enfoque implica la ruptura con las opciones epistemológicas que propone la pedagogía transmisiva, donde el conocimiento es un producto ya elaborado que mediante diferentes modalidades se trasmite al alumno. Sin embargo, analizando el contexto, dichas denominaciones presentan variaciones de significados. La concepción del NE como facilitador expresaría una aproximación discursiva al enfoque constructivista, o al menos participativo, al reconocer la necesidad de contar con habilidades como ´capacidad de escucha, empatía, compromiso y reconocer el conocimiento del otro` –identificadas como fortalezas o debilidades en la formación profesional-. No obstante, el significado de este concepto no es homogéneo ni monolítico, sino que oscila entre algunas concepciones más próximas al conductismo centradas en el cambio de hábitos, impuesto por el profesional, que implica una ´traducción` del conocimiento científico al ´lenguaje sencillo`, hasta otras visiones enfocadas en la autonomía del sujeto, mediante el fortalecimiento de su ´capacidad crítica en las elecciones alimentarias de la comunidad`, para lo cual se pone a disposición el conocimiento científico (´la información`). El NE entendido como trasmisor, tampoco responde a una visión puramente transmisiva, sino que se complejiza cuando es definido como un ´proceso`, que requiere de un diálogo de saberes donde se reivindica a un otro que al aprender también emite significados, cuestionando visiones prescriptivas o normativas de la Nutrición. Las concepciones del NE no aparecen vinculadas con la edad y antigüedad de las docentes, pero sí con los espacios curriculares en las cuales se desempeñan, mostrando ciertos equipos docentes mayor grado de solidez, profundidad y problematización del tema. Los aspectos limitantes de las acciones positivas mencionados son: falta de experiencia, tiempo, otros recursos, y modalidades paternalistas y verticalistas en la práctica educativa. Conclusiones: Este trabajo da cuenta del valor otorgado a la tarea educativa por las docentes entrevistadas, así como la proximidad teórica con enfoques superadores que se manifiesta desde lo discursivo. No obstante, las contradicciones y tensiones en el sentido dado a aquellos términos revela la complejidad en su apropiación y la necesidad de un análisis más profundo de la propia práctica a fin de aportar a la construcción de iniciativas que posibiliten la ruptura epistemológica con los enfoques tradicionales aún vigentes. Investigación cofinanciada por la Fundación Mapfre. Referencias: 1. De Souza Minayo MC. La artesanía de la investigación cualitativa. 1ª ed. Buenos Aires: Lugar Editorial, 2009. 2. Coll C, Martín E, Mauri T, Miras M, Onrubia J, Solé I, Zabala A. El constructivismo en el aula. Barcelona: Edit. Graó, 1999. 3. Ferreiro Gravié, R. Estrategias didácticas del aprendizaje cooperativo. El constructivismo social: una nueva forma de enseñar y aprender. México: Ed. Trillas, 2003.